
Comunión de Pablo.
Cuando te encargan un evento, da lo mismo si es algo sencillo o más complicado, si es algo simple o con muchos elementos, si has tenido poco tiempo o mucho, al final, nuestro propósito es intentar que guste, que encandile, que cuando entres por la puerta tus ojos se abran como platos y tu boca se desencaje de lo abierta que se queda.
En la comunión de Pablo , realizada en la venta del Sotón, no podía faltar un Candy bar musical en tonos azules y blanco, por eso sus padres nos encargaron de manera express este precioso trabajo, para ponerle un poco de ritmo dulce a este momento tan especial y ver esos ojitos azules abrirse al máximo.
¡Felicidades Pablo!